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miércoles, 18 de junio de 2025

LA VOLUNTAD Y LA FORTUNA:

“¿Me daba cuenta?, preguntó retóricamente señalando a lo bajo y a lo lejos, un país de más de cien millones de habitantes que no puede darle trabajo, comida o educación a la mitad de la población, un país que no sabe emplear a los millones de obreros que necesita para construir carreteras, presas, escuelas, viviendas, hospitales, para preservar los bosques, enriquecer los campos, levantar las fábricas, un país donde el hambre, la ignorancia y el desempleo conducen al crimen y una criminalidad que lo invade todo, el policía es criminal, el orden se desintegra, Josué, el político es corrupto, hace agua la trajinera, vivimos en un Xochimilco sin María Candelaria o Lorenzo Rafael o puerquitos que nos salven: los canales se llenan de basura, los ahogó la mugre, el abandono, las espinas, el cadáver del puerquito, los huesos de pollo, los restos de las flores…”

 Palabras de Carlos Fuentes en 2009 en ésa magna obra que es "LA VOLUNTAD Y LA FORTUNA".

POESÍAS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS

 

Qué partida de ineptos debemos de

Ser los poetas para que ahora

Los jóvenes prefieran el box a la poesía.

La poesía era para la musa decía yo.

La poesía empezamos a pensarla junto a las

Mujeres mientras los idiotas se peleaban.

Las musas nos enseñaron a reír.

La poesía debe ser el sustituto de la religión

Dijo uno otro poeta muy laureado.

Pero por muy bruto que yo sea tampoco mis manos desean

Golpear a algún muchacho más joven que yo, por quién sabe qué

Malas razones de orígenes infames.

La poesía es quizá, lo único que hacemos las gentes

Que no tiene nada de vileza; es más cabrón solidarizarse

Con la soledad del que me encuentro en el supermercado,

Que acaso pensar en que deseo pegarle como a un desgraciado.

Qué partida de ineptos, caray, los poetas actuales,

Pero mejor volvamos al problema de la pluma. 

Por eso ‘problematizamos’ las poesías y siempre nos

Gustaron los problemas filosóficos.

Ahora que no somos tan jóvenes, lo recordamos

Con orgullo y una pizca de risa.

lunes, 12 de mayo de 2025

POEMA DE AMOR. POR MARCOS GARCÍA CABALLERO


 

Sobre la mesa de centro de mi departamento

Hay dos vasos con vino rojo, una botella de Cabernet

un disco de John Lee Hooker y otro de Fleetwood Mac.

También obras de Russell, entre ellas, Por qué no soy cristiano,

Un libro de Guillermo Cabrera Infante, una tasa,

unos cigarros delicados y un cenicero.

Es sábado por la tarde, una tarde cualquiera del año 2016

En el sofocante verano de Aguascalientes.

Espero a mi novia, esperando que ella también,

se deshaga de una vez de

los abogados de su exmarido, que no quieren soltarle ni un centavo.

Por fin suena mi teléfono, viene en coche para acá;

al llegar se alegra del vino y se queja del sistema de

justicia en cuanto a divorcios se refiere: “¡Puedes entender

al hijo de la chingada! ¡No

Quiere pagar pensión alimenticia de nuestras hijas!

¡Puta Madre! ¡Marcos, si no te tuviera a ti no sabría qué hacer!”

Y me besa.

Le cuento que por fin editorial Planeta accedió a revisar mi novela.

¿Por qué no me haces un poema de amor? Me pregunta.

Lo siento Renatita chula, —le digo— los poemas de amor se han ido

para siempre.

“¿Pero me quieres verdad?” Me río y le digo que sigamos bebiendo.

Tengo hasta para otra botella y John Lee Hooker canta mejor desde

Ultratumba que cuando vivía.

Nos estamos besando como desesperados,

ella me desabrocha la bragueta y yo me paro y me bajo los pantos,

quedándome en calzones, ella mete su mano y saca mi pene erecto

que la saluda como en un día de Haloween en Francia,

pero celebrado en Hot Waters City o Aguas-ardientes.

Seguimos bebiendo, ella empieza a masturbarme y me fascina

tanto que prolongo el éxtasis lo más posible.

Afuera el viento comienza a anunciar la noche y los

del sistema de justicia y los de editorial Planeta se nos

quedan viendo mientras

seguimos bebiendo, seguro, pero no entienden nada.