© ®

Todos los textos son propiedad de sus autores, quienes tienen todos los derechos sobre ellos (¿o será al revés?) y han decidido libremente publicarlos aquí para la difusión pública sin fines de lucro. *Este proyecto está basado, en sus orígenes, en la idea de Dulce Chiang y Alicia Quiñones



viernes, 19 de diciembre de 2008

Gracias por tus felicitaciones Pako Puente. Yo a mi vez también felicito a Gustavo Orozco por el premio de poesía tinta nueva. Qué bueno que Anuar convocó a un premio exterior a Hápax porque, no es que no tenga en buena estima a mi poesía, pero hay otros que deben presumir sus logros poéticos... no Gustavo? no Leticia? no Alicia Quiñones? Creo que es momento de que a hápax se le tiren cebollazos y se consolide, lo digo por todos lo que Pako nos ha convocado.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Felicitaciones a Marcos García Caballero

Felicidades, Marcos, por ganar la beca que otorga el Fondo estatal de Aguascalientes para la cultura y las artes, en la disciplina de literatura.

¡Enhorabuena, hermano!

Es un honor tenerte en Hápax poético.

Y para instaurar una tradición en ese tema de las felicitaciones, publicaré un texto tuyo:

Poema estilo los de Eduardo Casar*

Tus hombros son dos espumas afiladas
a la orilla de una cabaña,
tu sonrisa es la paz vertical
de una corriente marítima que se alegra
al mirarse en otras pupilas,
tu voz es el fuego de una porcelana
que cae interminablemente en el eclipse
de un suspiro, donde contemplo
tu destino y sé de tu sonrisa de nuevo,
por un mástil que cae como la sombra de un olvido.
Es entonces cuando te retengo en mi memoria,
como esa escalera que subo mientras
tu bajas para encontrarnos en lo ajeno,
lo más propio, lo más precioso, la determinación;
como un oasis en medio
de la ciudad, para mirarnos, caminar y mirarnos,
desayunar y mirarnos,
vestirnos y mirarnos,
ir al cine y mirarnos, platicar de la película y mirarnos;
entonces, nos miraremos profundamente,
como si cada quien estuviera en diferente siglo,
en diferente calle, en diferente nombre, en diferente identidad,
hasta que de tanto mirarnos, tus cejas se parecerán a mis cejas,
tu boca a la mía, hasta que seamos entre tú y yo,
una sola sonrisa que no se despide.

*Marcos García Caballero

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Ojos árabes

Hay luna en tus ojos,
pero no luna llena,
hay luna menguante
atrás de tu velo
y hay luna-arracada
colgante:
cuna de cielo.
En tus ojos hay agua,
agua de oasis perdido en las dunas:
secreto del beso.
También hay misterio:
desiertos nocturnos y estrellas fugaces,
rutas secretas, y joyas y oro,
y gemas y genios, zafiros,
embrujos.
Tormentas de arena, de fuego;
en tu carpa refugio.
Ojos-oasis
ojos-estrella
ojos-desierto
ojos de luna:
tormenta de estrellas,
oasis desiertos,
ojos de fuego y de miel,
ojos de pozo con eco
de agua con eco
de tiempo con eco,
tiempo-agua-ojos sin velo,
pletóricos, rebosantes
desbordan de Grecia
(filósofos caminantes),
de Roma, de India, de Persia.
Con diamantes inscrustados,
tus ojos comercian
con especias y la furia del tigre.
En tu noche errante avanza el día
hasta que abres los ojos,
y el sol cae en ellos
muy hondo y profundo.
¿Y tu mirada?
Tan sólo encandila.

martes, 25 de noviembre de 2008

La luna que odia

La luna que odia
*

Para que la paz vuelva a mí
Me vestiré de negro
Me sepultaré para lavar tu ser,
Sólo no te vayas aÚn, Luna
Mi sombra suele escapar, sÍ,
Sólo estoy matando el tiempo,
Me gusta tenerte aquí
guardar tu atención a mí,
Exquisitas son tus mejillas
Y tu sonrisa que me alumbra,
No te vayas que morí
Y no hubo quién llegara de negro
todos están afuera en su mundo,
por favor alumbra mi féretro
en tu odio que es mi felicidad
¿puedes quitar el hedor de mis palabras?
¿y consígueme un beso de ella?
cambié la cerradura y su luz vuelve a mí,
De día no consigo hacer la noche,
No basta fallar tengo que caer,
Rompí otro espejo queriendo escapar,
Escapando me volví a encontrar,
Aprendí de lo que no tengo
Y descubrí lo que poseo,
Conciencia pura que me hace recordar
Forzando el odio y forzando mi dolor,
Todo lo que inventé me hizo pedazos
cachos zurcí y monstruo creé
pues Luna,, vivirás mejor lejos de mí
porque mi caída te echaré a un lado
al final te recordaré y seré feliz
la maldad que no espera
y me viene mejor a mí
que para salvarte

Debo hacerme odiar

lunes, 24 de noviembre de 2008

Remedios Caseros. Retrao #2 (solo para violín y chelo)

Nuestras heridas tenían labios
y en el abrazo, el beso
derramó la sangre,
la sangre veneno,
la misma sangre rojo coctel
hecha a base de años
y años de tristeza.

En la noche el abrazo,
tuve la sensación de ser muy pequeños,
de la mano ante el mundo
y su cortina negra que no quiere abrirse.

Mamá quiere hacerse cachitos, dijo,
y hacerse el relleno de ese hueco que llevamos dentro.
Bien dijiste, nadie comprende si no lo ha vivido
y es que papá nos rasgó la carne
y quedamos desnudos,
huérfanos en nuestro propio mundo.

La soledad punza, mija,
Y el hambre se nos hace miedo.
Llorar, llorar, llorar.
¿Acaso habrá de deslavarse la palabra que entró con sangre?

Te pensaba ajena,
y eres más carne, más sangre y más alma
de lo que jamás hubiera pensado.
Amar es de ciegos
y nacimos con los ojos cerrados,
quizá mamá los vendó para ayudarnos a negar,
pero el tiempo es su enemigo
y hoy habla mamá por teléfono
para tranquilizar sus nervios.

Mira mi espina dorsal, es de viejo.
Mira tu hígado, está enfermo.

Anoche el abrazo y te derramaste toda,
eran las goteras de un intruso que usó un paraguas
para picotearte el esqueleto.
Anoche el abrazo y reuní al mundo
para envolvernos y sentir alivio,
pero se nos quebró la fuerza
y tuvimos que volver a recordarlo.

A tus labios, amor.

Menudos cojines rosas de hendiduras cosidas a mano,
que de lejos el viento las toca como flores del más tierno campo
y de cerca son flores de miel, que atrae a la abeja su encanto.

Obscuro y bello secreto esconden en medio de entrambos,
que inspira tremendo viaje mas grave que el vellocino dorado.

Segregan un dulce y cálido humor que anhela ser aspirado
y al serlo, esperando en ti, se olvida la espera de estar a tu lado.

viernes, 21 de noviembre de 2008

Ruega por tu alma

Ruega por tu alma

Ruega por nosotros señor
Recita el niño bajo sus cobijas
Reza con tanta fuerza
Como el párroco lo ordeno,
Pide pronto encontrar la paz
Anhela un fin cristiano
Ama a la iglesia
Como se lo han pedido,
Mientras las pesadillas invaden su cabeza una y otra vez
Algo hay malo en el mundo han muerto los Ángeles,
El escapa corre, el sudor y el abrir los ojos
No entiende porque hay llamas en la tierra,
No entiende porque debe callar,
Se cubre temblando el frío que nunca se quita
Desea que nadie vuelva a entrar,
Estrellas de la noche arrúllenle
Porque en el día ya no hay luces,
Plegarias que piden por dispersarse,
El párroco le dio sermones que el no debía hablar,
El párroco le dijo que dios con el siempre estará,
Tus plegarias, pequeño no las debes olvidar
A todos los debes incluir a todos amar
el es su guía y su único aliado
Si lo pides con mucha fe
tu alma puedes salvar,
Recuerda el castiga a los que obran mal
sus lagrimas las guarda en frascos
tiene fe que todo cambiara
y sus frasco vaciara;
Marcas en su piel invisibles ya
y dolores que nunca se olvidaran,
El niño dormía cuando el azufre se olio
Agarrado fuertemente a su almohada
Demolido, la suelta a golpes,
Gritos no sirven todos lo saben
Pero todos lo callan por fe,
Mientras sus ropas caen
como las lagrimas,
Como aquella sotana negra
y aquel rosario,
Mientras su cuerpo es profanado
Y su inocencia se escurre otra vez,
El sudor de aquellos cuerpos
se confunde entre lagrimas,
el placer de aquel cuerpo gimiendo
es de quien guiara nuestras almas,
No debes maldecir solo amar
el ladrón se despide
pidiéndole orar,
Tumbado en el piso a Jesús le vuelve a hablar
la noche cubre todo
otra vez en silencio todo estará…

lunes, 17 de noviembre de 2008

Noviembre en el Altiplano (2007)

Hay que arrastrar el cuerno rutilante en éste valle dilatado,
la penúltima ocasión
de ver al yo y su consciencia sumergida en otro arcoiris
de lucha y de demencia.
Hojalá nunca jamás muerta ni tiernamente olvidada
en cualquier cantina con otros espectros, o
cualquier pinche miserable historia.
Éste acto es la sub secuencia de mi esperanza,
lo que no cede,
lo que parpadea en función de mi pobre ciudad
diluida en un atardecer
olvidado por la Historia con mayúscula y la Posmodernidad
solamente es una eterna cosa pospuesta.
Éste es el adjetivo, la bestia en su más hondo fundamento,
la soledad negra de dos amantes,
y dos colores eternamente subjetivos y tensos
en la parquedad liviana del otoño.
¿Recuerdas la plaza, la luminosa plaza y
el pavimento corroyéndote las venas, un día más y otro
simplemente como una interrogante que te ciega en tu saber o tu ignorancia?
Entonces es así, mi propia realidad un cubil o un oasis para capturarte,
ciudad de Aguascalientes, (la mega hacienda postindustrial)
cuando ya todo sea olvidado,
cuando ya ciudad de México sea un pobre holocausto sin noticias
para llenar páginas y más páginas,
fierro muerto y sólo fierro muerto sobre fierro,
volveré a detenerme acá en ésta ciudad que no me pertenece,
hundido en una total omnisciencia de personaje arrastrando levedad,
en ésta ciudad que ha pateado mi amor y mis utopías como si nada,
como en cualquier parte,
dejaré de tejer mi Cristo y mi máscara de vértebras
para ver si así recupero mi autenticidad del sueño injusto
e infernal de hacer poesía simplemente por el gusto de hacerla.
Y sin que nadie sepa, sin que nadie ya vea hacia la portería,
Habrá más gol y ¡gol!
Pero sin suspirar por la pérdida…
Y no quedar postrado ante la sombra,
De quien lo sabe todo pero nunca dijo nada.

sábado, 15 de noviembre de 2008

normalidad

¿Donde encuentras la sinceridad un mundo disímil?
Me someterían con castigo pero debo luchar
¿Que piensas hacer para callar sentimientos de rebelión?
Hombres amargos tratan de callarme el régimen debe seguirse,
demasiado viejos para cambiar, luchan por no podrirse
pero no se dan cuenta que sus cuerpos ya apestan,
¿porque intentas ser normal cuando somos anormales?
si no puedo resaltar me disiparé en el sitio
Seré parte de todo siendo parte de nada,
¿Solo debemos caminar y ambicionar morir?
Ellos no son libres luego de marcarse por el oro
No pretendo alinearme a tu ideal de grandeza,
Me quite mi dogal y perseguire mi ideal
luchando por conseguir que todo cambie
Puedo derramar mi propia sangre no cederé
El vender mi alma me puede hacer como tu
Pero hay sudor en mi frente y respecto por mi obra,
Discursos oscuros te dan poder, mientras enmudecen y ven
inhumado nadando en el frío que me quema a verte,
Deseo volver a mi realidad de anormalidad,
días en la luz y sombra rehacen sentimientos de libertad
El nunca obtendrá respecto de mi y jamás me alineare,
somos libres y mi rencor a tus ideas lo que me nutre
no hay razón en mi motín solo mi desconcierto a ti,
Mi cuerpo flemático por el hierro de tus cadenas
Cada que lo demueles de sus cenizas volverá,
y si le pisas, su ideal regresara con más vigor
mi pasión es incontrolable necesito liberarla,
El mundo entero vibrara ante mi voz
Gritan jadeantes de tu opresión,
Salta de su albor y entra a las tinieblas
Solo has lo que tengas que hacer
Antes que mueras atado por ti…

viernes, 14 de noviembre de 2008

Fogata cultural una noche de bosque.

I
Danzan las noctámbulas criaturas
en derredor a la fogata,
volando invisibles sobre las hojas
que pisan, imanes de nuestras
miradas que exploran atónitas
el vació que circundan los goliates pinos

II
La fogata; (enhiesta pértiga
Nefanda de la noche, de
mis nervios, el bosque y mi
corazón) eleva su marea
amarilla quemando
las manos del
Goliat que nos pseudoprotege

III
Los nahuales se mantienen
A raya, exhortando al fuego
-que no les impide nada-
para que no los deje pasar a
invadir mi tonal ni
nuestras asustadas y vapuleadas almas

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Todos los días*

[Fragmento]

El sol nace como siempre:
la sombra, al pie del árbol,
aparece larga y lánguida
apuntando al horizonte.
(La brisa continente se disuelve
hasta exhalarse completa.)
Cántaros y fuentes cantan
de incontables copas verdes.
La luz incide,
entre rufa
y gualda.
El tiempo quieto
se desborda como un mar
con una grieta.

Augura,
la tibiez de alguna piedra,
las tinieblas que se han ido,
que no vuelven mas esperan,
que se funden en el día
—presente irrevocable en las tinieblas—
como muerte en natalicio.

Es un resurgir constante,
un fénix abrasado en pleno vuelo,
pisada descuidada de la musa
desmentida por la ola.
Flor fragante y fenecida
risa pronta vuelta llanto.
Un amor a tientas: lento;
preguntando en cada esquina
sin salirse de la plaza,
sin moverse, en el centro;
sosteniendo la paloma
en el brinco de su vuelo.
Deslizando cada hora
en derredor, vagando entre las sombras.
Renaciendo en cada giro
y muriendo al mismo tiempo.
Muerte de piedra, solaz de los vientos
que recorren y acarician
supliendo manos, carne, besos, cuerpo.
Alguien abre una ventana:
Descuido que calienta un seno terso,
un brazo fino y cuello de alabastro.
Los últimos recuerdos del ensueño
huyen a la plaza en vilo.


*Título temporal.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Escaleras




Tiempo y belleza
La Habana, Cuba, 2007



Maitea

nace en silencio el sueño de la noche
toma tu mano y se alza
velamen
frente a la fronda inmensa del mar
y de sus sales
algo como un sueño en la tormenta
algo como un ojo que no acaba

la mano que en mis dedos cabe
blanca enciende en la nieve
y tacto de ave
es camino y es vuelo y es mirada

todo entonces despierta y toma forma

en calma
la estrella de mar
dueña de su quietud
señora
ilumina este paso en el que escribo tu nombre
y algo
como una flor
se levanta




Gustavo Enrique Orozco

Felicitaciones a Gustavo

Felicidades, Gustavo, por ganar el XI Premio nacional de poesía Tinta Nueva.

Es un honor tenerte en Hápax poético.

Y tomándome una licencia, al amparo de la amistad, publicaré un texto suyo:

*
el pie de la luz entra en el polvo descalzo
su semilla se abre como la flor en que sopla tu deseo
eres una niña de cinco mil años
que mira levantarse incendios en la sombra
mira formarse en las volutas
hipocampos
puentes de luz para ir a andar en ellos
y mirar a los peces en sus giros
el suelo da la desnudez de sus espaldas a la aurora
su espíritu de barro dibuja la cadera en la jarra
y besa su inmensa sed
a cada paso que da la niña que se acerca
su dedo casi toca alguna carpa brillante
la he visto cuando no hace más que ver al fondo de los ojos
de esos peces plateados desde el puente que hace su respiración tranquila
le han dicho
yo lo hice
que los peces son hadas dormidas


*Gustavo Enrique Orozco

lunes, 27 de octubre de 2008

Divagaciones sobre cine, poesía y pintura..

A Maricruz Patiño

Desde hace tiempo he sospechado que el lugar que ha desempeñado el cine en el siglo XX, desde un punto de vista sociológico, fue el mismo que desempeñó en el XIX la novela, así como el teatro en el siglo XVI y tal vez en este siglo XXI sean las nuevas tecnologías virtuales y el internet. Dejo en un segundo plano a la televisión y la radio ya que me parece que su campo de acción pertenece a tiempos y a duraciones más efímeras (aunque en su flamazo se nos vayan los días y semanas en las grandes ciudades) y no de gran impacto en la sociedad, a pesar de que en México se ve mucha televisión y la radio tiene el honroso prestigio y nobleza de comunicar precisamente a las comunidades más alejadas de las grandes urbes o megalópolis del planeta. La radio comunica a ranchos, pequeñas haciendas, pueblos de playas semivírgenes y da cuenta de los hechos locales política y culturalmente informando el latir de esas comunidades. En un país como México, en que desde los tiempos en que terminó la Revolución se habla de que las ciudades han superado a la sociedad campesina y que debemos ingresar a la modernidad en términos de legitimidad de gobierno, democracia sin cortapisas y un definitivo alto a la corrupción y al narco, nos hemos dado cuenta de que estamos condenados a que esas ideas sigan viniendo sin cesar, siempre prometedoras, siempre inalcanzables, siempre esperanzadas. Así lo vio Vasconcelos cuando tuvo que empezar desde cero la tarea educativa del país. No importaba que la gente no leyera si es que acaso sabía: era preciso penetrar con los clásicos griegos por todos los rincones del país: Aristóteles, Píndaro, Homero. Ya después se cotejarían los resultados: lo importante era darle a México un pasado de dimensión internacional.
Me he referido al latir de las comunidades y lo hago ahora también de las grandes urbes: en los años cincuenta del siglo pasado ese latir estaba perfectamente empatado entre cine y literatura en México, no en balde es llamada la “época de oro” de nuestro cine. Por ejemplo, las películas del guionista Alejandro Galindo estaban basadas en reminiscencias de textos fundamentales de ésa época: El laberinto de la soledad, La región más transparente, El perfil del hombre y la cultura en México, etcétera. Entre las luminarias de nuestras letras había un debate muy importante sobre la identidad nacional que Galindo, con un enorme colmillo y conocimiento de las tretas cinematográficas, plasmó en películas como Los hermanos de hierro. Y creo que esto tuvo y tiene mayor impacto en las sociedades y que definen mejor el sentir de una época y que reflejan lo que la gente quiere y quiere ser, muy aparte de los fenómenos mediáticos. Por ejemplo, en la actualidad, hace poco tiempo películas como Sexo, pudor y lágrimas, Amores perros, La perdición de los hombres o Y tu mamá también... y en un lugar no menor aunque de menos alcance de las grandes masas, novelas como La piel del cielo, de Elena Poniatowska, galardonada con el premio internacional de novela, Alfaguara 2001, El otro amor de su vida de Héctor Manjarrez o la multimencionada En busca de Klingsor de Jorge Volpi. (Finalista de la encuesta de las mejores novelas mexicanas hecha por la revista Nexos) Y así lo seguiré creyendo, ya que me niego a definir a nuestra sociedad por el número de partidos de fútbol que se ven en las cantinas de la ciudad de México.
Vuelvo a mi sospecha: el cine deja atrás a la novela como hecho cultural que se inserta en el cotidiano histórico. Pero a su vez, el cine debe mucho a las grandes novelas del siglo XIX. Así lo vio Tolstoi en una enorme profecía citada por Fernando Savater en un hermoso artículo titulado “La palabra imaginaria” (revista Intermedios, marzo de 1992):
“Ya veréis cómo este pequeño y ruidoso artefacto provisto de un manubrio revolucionará nuestra vida: la vida de los escritores. Es un ataque directo a los viejos métodos del arte literario. Tendremos que adaptarnos a lo sombrío de la pantalla y a la frialdad de la máquina. Serán necesarias nuevas formas de escribir”.

Las deudas del cine a la literatura y su relación son brillantemente exploradas por Savater. Pero yo me pregunto: ¿Y la poesía, y la pintura, la música? La música se ha revelado como una hermana casi gemela del cine, al nacer el cine sonoro y más adelante, el soundtrack, así que entre la combinación de música y escenas sentimentaloides o emotivas en la pantalla, la gente las confunde con poesía y cree que de un plumazo se pueden borrar a Baudelaire, Vallejo o Huidobro. Hablando en plata, es sabido que el cine es una bola de trucos que obligan al espectador a interesarse, a desbordarse y a entusiasmarse con una trama o unos personajes. No hablo aquí de los grandes creadores de cine, como Orson Welles, Bergman, Kurosawa, Tarkovski, Kubrick o Buñuel. Sino el cine normal, norteamericano, hoolywoodesco, predigerido y de hecho mucho más disponible para el espectador de a pie: usted o yo. En esos terrenos, la poesía y la pintura casi no tienen nada qué hacer junto con el cine. Tal vez esta aparente lejanía se deba a que el pintor es un poeta por otros medios, es decir, que presenta un mundo estético acabado al igual que el poeta con sus palabras, se trata de una estética que no se conforma con re-presentar al hombre o la naturaleza, como lo hacen la novela y el cine, sino que en realidad presentan ese otro mundo donde vivimos nosotros: el alma, la otredad en el yo o la ensoñación, tema brillantemente explorado por el franchute Gaston Bachelard en su ensayo La poetica del espacio. Existen ciertas ideas psicoanalíticas que defienden al cine comparándolo con los sueños. “Soñamos como si viéramos una película”, parece ser la conclusión con la cual el psicoanálisis avala al cine y lo declara moralmente sano y recomendable. A los que así piensan y (sobretodo): ahí se detienen, los remito al espléndido cuento de Bertrand Russell Ajuste. Una Fuga para que descubran lo que le pasó al psicoanalista que intentó someter a diván a los grandes personajes de Shakespeare. ¿Qué pensaba Freud sobre lo que descubrió Lumiére? Por lo menos hasta donde yo tengo noticia no hay un texto freudiano amplio y contundente al respecto. Por tal motivo, creo que en ésta tónica (por lo menos la de ésta nota) Bachelard fue mejor detective: es la ensoñación el estado en el que verdaderamente el individuo se revela, dialoga y examina su propia vida. Cuando se trata de penetrar en el interior de un personaje, el cine se vale de una nubecita (ahora este efecto está casi ya superado) u otros que nos muestran un mundo onírico, pero pintores y poetas saben que esto no basta para hacer poesía; poetas y pintores reflexionan, se inspiran (es decir, tienen visiones de la materia o sustrato poético sobre el cual trabajarán, lo cual es muy distinto a imaginar propiamente imágenes: el binomio imagen visual-imágen poética no existe) y no sólo sugieren, como lo hace el cine. El arte pictórico y poético expresan la fascinación y el vértigo de sentir o indagar en el alma propia, lo cual es una defensa preciosa de la subjetividad: poesía y pintura insinúan lo otro, el cine insinúa un truco. Aunque partimos del hecho de que ambos caminos seducen, (en el sentido de que en cualquier seducción hay algo de trampa y espejismo), en poesía y pintura la seducción nunca acaba: la prueba estriba en que un buen observador de cuadros o un buen lector nunca se cansan o se aburren de las buenas pinturas o los buenos poemas; en cambio, mirar la misma película más de una o dos veces resulta un tanto bruto. En fin, el cine tiene muchos grandes novelistas, en el sentido de la estructura narrativa, pero aún le faltan un Borges, un Neruda o un Salvador Dalí. El día en que esto se muestre, será gracias a que los hoy aprendices de cine habrán leído a Bachelard, la ensoñación se desnudará y así comprenderemos una vez más, que el cine puede y debe ser un arte, que al igual que todos los demás, necesita revolucionarse en contenidos y no sólo en aspectos puramente técnicos.

Abril 2003
Me postro ante Tu hijo,
Me levanto.
Lo veo en el templo,
adormilado,
adolorido,
crucificado.

Se oyen rezos entremezclados.
Todos oran,
se persignan en Tu nombre
y se van.
Nadie puede salvarlo,
debe morir.

Es un hombre
clavado
triste
solo,

Yo me acerco.
Le quito la tela
y dejo su sexo al descubierto,
me empino
y comulgo con su vino derramado.

Relamo su sangre
beso sus pies
y me largo.
Salve Dios
mi cuerpo estructurado en el caer de sus piernas,
al lamer sus llagas
y saciar el hambre de mis senos,
al intercambiar mis pezones
por sus clavos.

Salve Dios
la incapacidad de mis sueños
al no evitar sobre la cruz
mis orgasmos.

Dale Dios
Misericordia a mi alma,
no a mi corteza,
para separar al amor de la concupiscencia
sin evitar que el segundo Adán
yerre en la humedad de mi garganta
al tragar mi salvación
y sentenciarlo.

Sálvame Dios
de lo que soy
de lo que no soy
de lo que fui
al clavarme en su cruz
y llevarlo al pecado.

Salve Dios
la caída,
su caída entre mis manos.
Piedad, Señor,
para la infidelidad del cuerpo,
no de mi cuerpo,
sino de aquel que se cansa
del mismo falo
y busca en la trinidad de cada nueve hombres
cimentar su orgasmo.
Mi cuerpo se parece al de María
María madre
María esposa
Vírgen María.

Su alma no se parece a la mía
mujer lenta,
mujer puta,
mujer lenta
mente
puta.
El vacío de mi vientre no engendra vida y sangra
el vacío de su vientre engendró vida y una corona de espinas
lo desangra.
Busco a su Hijo:
un clavo en la pared detiene su cruz
tres clavos detienen su cuerpo en esa cruz.
Me observo en su cuerpo
beso sus labios
palpo la perfección de sus ángulos
se lubrican mis muslos
cada clavo es un falo
mi clítoris murmura
la madera endurece mis senos
y me siento virgen-puta
virgen con sangre en vientre vacío
puta de cuatro labios humedecidos;
cierro mis ojos
me rezo
me rozo
razono mi cuerpo
advierto mi cuerpo
me siento Él y cambia a Mujer
mujer en cruz
virgen-mujer dando a luz...

y regreso a un cuerpo no tan virgen
no tan puta
mujer virgen porque los falos no hieren mi vientre
mujer puta porque los clavos me acechan y el pecado me dice
que mi cuerpo se parece al de María:

María madre
maría esposa
virgen María.

martes, 21 de octubre de 2008

preguntado por ti

Y solo te volví a rodear
con mis manos te estreche,
para que nunca te alejaras
pero tu cuerpo aun así escapo,
y busque en el silencio
pero un ruido me cegó,
te miraba con mis manos
pero mis ojos no te observaban,
así que caímos juntos
pero solo estaba en la nada,,
junte estrellas para recordar tus ojos,
mire al sol para recordar tu piel,
y adore al diablo recordando tu ser,
todo fue tan fugaz
que durara por siempre
tu presencia solía hacerme temblar
tanto como la oscuridad
tu ser solía ponerme de buen humor
tanto como las drogas
tanto como el alcohol
y un día todo acabo
pero aun sigo preguntado por ti

lunes, 20 de octubre de 2008

Dos

Cuando partan

Cuando partan
pararé los relojes,
el del buró, el despertador,
los tres relojes que tenía ella:
el azul, el morado y el negro.

Me quedaré sentado
unas horas, quizá unos días.

Me pondré de pie
daré una última ronda a la casa:
lavaré los trastes,
vaciaré la tina,
haré las camas.

Un tiempo después de terminar
de oír sus pasos alejarse,
limpiaré el refri,
desconectaré todos los enseres:
la cafetera, la lavadora, el micro.

Limpiaré el comedor,
dejaré todo reluciente.
Borraré el mensaje del teléfono,
borraré el disco duro del ordenador.

Después de dejar todo listo
y reluciente,
después de hacer todas las llamadas:
saldré corriendo,
desquiciado,
llorando y lamentándome.

Saldré arrastrándome,
atenazadas las piernas de dolor,
con miles de nudos en la garganta.

Saldré corriendo,
con el miedo detrás mío.

Cuando partan,
saldré corriendo
detrás suyo.

Cuando partan,
saldré tras ellos.
Mis días vacíos, grises.
Cuando partan,
moriré con ellos.

Caminarás al horizonte

Me quedaré sentado,
tú, caminarás al horizonte,
alejándote.

No me fijaré en tus huellas,
no te seguiré,
ni buscaré tu rastro.
Dejaré que te pierdas
en la memoria,
en las rocas.

Viajarás muy lejos,
no volveré la vista
y me quedaré aquí
a heredar el viento.

Aún sin título...

[fragmento]


«¡La poesía..., la poesía eres tú!»
Gustavo Adolfo Becquer


Soy nube y tú campo y cielo y el viento
que sube, pasea, viaja y estalla
rojizo
—sin tiempo—
en la hora que escapa
desnuda,
presa entre un par de montañas:
dos fauces terrestres e inexorables.

Tú eres el viento debajo del ala;
el dedo que apunta inmóvil al ave
fijada en el lienzo, ya vespertino,
de un pueblo lejano
y siempre culpable
de mi gentilicio, tu gentilicio:
la patria que es nuestra y huye en la noche
y hay que alcanzarla cubiertos de cielo.
¡De pronto despierto! Tú: omnipresente:
eres el halo que cubre la estrella,
la estrella y la mano que la sostiene.

Pero también yo soy yesca; tú chispa
y brasa y el viento
—constante viento—
que juega entre abrazos de nube y de humo.

sábado, 4 de octubre de 2008

Autopromoción (Novela)


Para algunos amigos míos y conocidos, éste proyecto mío se llamó durante mucho tiempo (EL jardín del pulpo), bueno. El proyecto de escribir éste libro empezó en 1998 y terminó ese mismo año. La historia original dio pie a tres novelas, una de ellas fue EDAD EN EL ALBA, premio Salvador Gallardo 2002 Aguascalientes, la otra novela, fueron trescientas cuartillas con las cuales no quedé satisfecho (pero la intención era la misma: contar las peripecias y los anhelos artísticos, viajeros, de búsqueda personal, de insolencia y de vivir en el Altiplano o centro del País, Aguascalientes, con la nostalgia del monstruo del Distrito Federal. Dos almas y dos geografías y dos memorias diferentes en los 90s me parecían suficiente para contar bastante....) Pero además estaba ésta otra historia, más intimista y con el carácter de un diario: El jardín del Pulpo, que ahora, ya salida de la imprenta con el nombre de ANTES DE TODOS LOS PARTIDOS y con un tiraje de 500 ejemplares se presentará entre varias veces y en varios sitios, en La Casa del Poeta en Álvaro Obregón Col. Roma En la parte alta en el café bar-las hormigas el 5 de noviembre miércoles a las 7 de la noche. Iván Ríos Gascón, Elena Bravo y José Vicente Anaya harán algunos comentarios de este texto que he denominado "ficción autobiográfica". Habrá vino de honor, la edición es casi de autor y no creo que circule en librerías. Pako Puente y Alicia Quiñones ¿Cuándo volveremos a vernos, en la bruma el trueno o el relámpago? naa.


miércoles, 1 de octubre de 2008

viejos hipocondriacos ...


Sacio una vida en la coladera
Vierto mi sangre y tu miras el espejo,
acaricio las luces de la noche
y las pongo a tus pies,
tu solo miras tus ojos cafés
arrugas penetrantes hay,
mi coraje se extirpo
en un amargado cuadro
no hay nada que pueda explotar,
deja de mirar lo que fue
las sobras marcan tus relieves,
no hay nada mas que caminar y caer,
yo caeré atado a ti,
los gritos no se oyen
hay mucho alcohol,
esperanza de ver la luz
temor de vivir en la noche,
miedo de prender una vela
no hay dios al que ame,
solo te pido un rezo por tu alma
para seguir prendiendo fuego a tu cuerpo,
un cigarrillo suele consumirse,
una vida suele apagarse
tras botella y botella,
todo lo que veo ami alrededor se inundara
es muy grande la sequía,
solo me preguntanos que sigue después?
encender una vela tener fe?
volverá el pasado a pasar?
las arrugas se marchitaran
y en mi espejo no esteras tu...

sábado, 27 de septiembre de 2008

8

Por si no te vuelvo a ver,
y hoy fuese mi último día,
quiero que sepas:
En tus olas mi balsa anduvo serena
en las horas aciagas del mediodía
y en las horas nocturnas.
Llegaste a mí muy tarde ya,
¿mas a quién le importan las horas en la mar?
La tuya fue una senda sin huellas en el agua,
sin nortes conocidos,
sin vidas despeñadas,
un amor en potencia, canas en calma;
y una ruta que a ciegas
de nueva cuenta navegaría mi alma.

domingo, 7 de septiembre de 2008

bailando con tu olvido

Hablame despacio

que mi vida se va rápido

Dame un suspiro

y dame un susurro

dame un ultimo beso

antes de irte,

vi al cielo mire la noche

en la oscuridad el frió llego a mi

si he de llorar por alguien ya no seria por ti

si he de morir no quiero que sea por ti

a un corre adrenalina si pienso en ti,

buscando una razón

pero no la encuentro,

¿siempre luces así de bella?

O solo fue que extrañaba

cuando devoras corazones

sueles reír porque sonreíste esta vez,

yo caigo y tu solo me vez caer

yo muero y tu solo me vez morir

¿la quieres mucho?

No lo sé creo que si

lo que quiero es que sea feliz;

sangra mi pecho

un disparo mortal

el corazón partido en pedazos

rápido corramos al un vació

¿no te inmuta el dolor

¿no te importaba yo?

¿Porque me importaras tu?

Ardamos en llamas

robemos una noche

destruyamos un día

analicemos la nada,

jugamos con el infierno

cuando estuvimos en el cielo,

Cuando mueras bailaremos y reiremos

cuando muera nos besaremos y cantaremos,

¿porque me importaría a mi?

¿porque he de seguir enamorado?

detener mi caída

es inevitable,

buscando una razón

pero no la encontré

así que dije adiós...




domingo, 31 de agosto de 2008

Soneto de autodestrucción

Soneto de autodestrucción

visión nublada
en un piso que se movió,
coloque mis explosivos
en mi carne mortal
y en tu un ser inmortal,
es mi pecho de ti exclusivo
lleno de una carga letal,
lo que me hace ser menos
añorando viejos tiempos
cabizbajo veo mis pies
¿cuanto faltara?

El día esta helando
suicidame con chocolate,
dije por siempre pero mentí
dije que hoy pero tarde,
lo puedes estallar
solo ve mis ojos
llamas provocaras,
si vuelvo a tardar
si no vuelvo a llegar
o si te vuelvo a besar,

nada detiene mi marchar
consumiéndolo todo
arrojo despojos a mi paso
alejado estoy de aquí

si escucho tu voz no resistiré
soy tan fácil caeré,
en la cuerda floja
espero tu soplido para caer,
triste es mi rincón
necesito gotas de licor
a tu salud y a tu recuerdo
ya todo es tuyo

espera un tiempo
antes de jalar el telón,
abre la ventana para vomitar
las palabras de mi corazón,
y mi cara te mostré
un grito escuche
caíste al suelo
algo se rompió
y estirpe de tu boca
todo el odio a la vida
todo lo que quise lo tengo ya
llorado por lo que tengo
y no he podido tomar

el alcohol no sacia mi necesidad
era mi viejo yo
el que se apodero de mi
lastima que eras tu
la que estaba ahí

suspiramos lo mismo
en el mismo sentido
esperando ecos pasados
recuerdos a tu lado
explotado planetas
destruimos galaxias
y estallo un corazón
al final de una botella de licor
y mas me embriago tu amor

miércoles, 27 de agosto de 2008

Del Poemario Infinitos dispersos (Alforja, 2001)

Variaciones Sobre La Madrugada

Es el sereno de las seis de la mañana. Las estrellas han dejado de estrellar sus puntitos blancos sobre los charcos, y dejan que los crucen las motocicletas cargadas con el periódico de tinta fresca recién sacado de las imprentas. Es el sereno de los amantes que se agitan desnudos en sus lechos igual que las golondrinas en sus nidos; algunos, tal vez, navegan por el incierto derrotero del deseo. Es el sereno de los autobuses humeantes y los trailers cuyo sonido atrae a la memoria el de los tablones de madera cayendo uno tras otro sobre el aserrín que provoca la sierra eléctrica de las madererías, o tal vez, quizá, por el mismo sereno esos camiones y trailers pasan por las calles como murmurando, como ronroneando, para vigilar por la propia virtud de su sonido, a los cientos de párpados cerrados que sueñan con sus propias galaxias, donde hay mundos llenos de ríos, de caribúes y de tigres, o donde Nueva York, el Cairo, París y la ciudad de México quedan del otro lado de ese mismo río de peces multicolores. Es el sereno de luz enamorada, que comienza su bajada a las comarcas y deja que se disipen los ateridos fantasmas que pueblan nuestro mundo. Es el sereno de los vasos sobre la mesa en la que ayer se discutió y se bebió. Es el sereno de las piezas de ajedrez que esperan quietecitas en su caja, el sereno del periódico que fue leído ayer por la mañana.
Pronto habrá que levantarse a reinventar el mundo y sus rutinas, pronto los pequeños ruidos volverán a ser la vorágine en la que nos movemos todos los días, pronto habrá que bañarse, poner el café y leer ese periódico que ya viene en camino; salir del sueño como un barco de su astillero y hacerse a la mar.
Pronto, ya es hora.

lunes, 11 de agosto de 2008

AQUÍ ESTAMOS
otra vez tu y yo
aunque me tildes de loco
mientras viajamos
y al dormir eres como mariposa
húmeda
perfume ocasional
en mis manos.
Poema parte de Infinitos dispersos, ediciones Alforja 2001.

martes, 15 de julio de 2008

Reflexión central

No tengo el gusto de conocer personalmente a Sergio Loo, pero definitivamente ha colocado en Hápax poético una reflexión central, y central no por la ultrajante pregunta ¿cuáles son tus 10 mejores poetas jóvenes? Sino por el cuerpo de la reflexión. Hace tiempo, charlando con un amigo en el deefe, José Vicente Anaya director de la revista de poesía ALFORJA que creo que todos conocen, al cuestionarle yo algunos parámetros personales en cuanto a calidad de ciertos poetas, me contestó: "Es necesaria la voz de todos los poetas, es necesario darle cabida a todos y cada uno". Después de leer a Sergio Loo, me da la impresión de que la gran opinión de Vicente Anaya (al que supongo nadie tildaría de mal poeta), como digo, es una idea que ya no se sostiene. Sergio Loo ha puesto el dedo en la llaga de la republicana idea de nuestras letras nacionales. Por tal motivo, sugiero a los demás miembros de hápax que reflexionemos en torno al asunto pero no desde lo oscuro sino en primera plana de hápax. En primer lugar porque no estoy de acuerdo en una idea exluyente de cuántos debemos ser 10? 20? 200? Finalmente casi todo ser humano ha escrito un verso, pasa como con los pecados: los pecados o los cometemos todos o no los comete nadie. Si de lo que se trata es de una cuestión FISCAL de CONCIENCIA para que se vea por la obra QUIEN ES QUIEN, yo Marcos García Caballero, dejo de ser poeta ahora mismo. Aunque vomite mis versos en el excusado. El espíritu propio de la poesia es todo lo más lejano a la fiscalización de la conciencia. Escribir es un acto de libertad, no hay más. Pero claro, me preocupa el asunto que debate Sergio Loo, porque entonces los buenos estarán en el Norte o en la Capital y no en niguna otra parte. Entonces, celebro en parte su texto, pero celebro también que nos coloque de espaldas a la pared. Alguien quiere opinar? Expandamos nuestras opiniones, al fin y al cabo no necesitamos a Letras Libres. Sergio Loo nos ha convocado.

miércoles, 9 de julio de 2008

Velocidad y Multitud
¿Quiénes son tus diez poetas jóvenes mexicanos favoritos?

Sergio Loo

La misma sabiduría del pueblo aceptó otra grave decisión estructural básica; tal vez la más comprometida que la nación ha tomado como el fin último de nuestro proyecto nacional: disminuir en el sexenio como lo hicimos, el incremento poblacional del 3.6% al 2.5% (…). Se concilió la necesidad, con respeto a la libertad de pareja que ha resuelto el número y esparcimiento de su prole. Fue otro logro estructural que puede convertirse en irreversible.

Avanzamos, de mantenerse esta tendencia decreciente, podremos esperar que para el año 2000 seremos alrededor de 100 millones de mexicanos en vez de 130.

Grave decisión ética entre lo cualitativo, y lo cuantitativo. El nivel de vida, el desarrollo social, frente al crecimiento inmoderado de población que lo hace imposible en este mundo lleno de contradicciones y limitaciones. En este momento de aturdimiento, tal vez no lo valoremos en su cabal importancia.

Para México, se trata de su futuro: cuántos mexicanos debemos ser.


“¿Quiénes son tus 10 poetas jóvenes mexicanos favoritos?”. La primera vez que me lo preguntaron me pareció, cabe obviarlo, ociosa, vanidosa, pretenciosa y tendenciosa. Me lo sigue pareciendo a todas luces, pero, pese a ello, resulta una cuestión que se responde, voluntaria o involuntariamente, una y otra vez, con la nueva selección para el encuentro, la antología, la revista, la reseña. Para mí, esta pregunta, es parte fundamental de mi generación.


Velocidad y multitud

¿Por qué diez y no tres o, simplemente, tu poeta joven favorito? Por azar tal vez, pero sobre todo porque somos muchos, quizá demasiados. Como en el VI Informe de Gobierno del entonces Presidente José López Portillo, pronunciado el 1 de septiembre de 1982 y anteriormente citado, México se debía preparar, ya que de 1976 a 1982 su crecimiento demográfico fue del 3.4. Por ello, años después, vendría la enorme demanda insatisfecha de aspirantes a cursar el nivel medio superior de educación, la implantación del CENEVAL, el examen único y, tres años después, la huelga de la UNAM y el desempleo.

Este es el primer paradigma de la generación: su cantidad. Si bien se piensa, un tanto románticamente, que el oficio poético es de unos pocos, resulta que en nuestro país esos pocos (no nos metamos ahora en cuestión de originalidad, manejo del lenguaje, etc.), quizás en parte a nuestra densidad demográfica, rebasan la centena. Para comprobarlo basta revisar algunas de las antologías o “muestras” de jóvenes poetas publicadas los últimos años.

¿Cuál es entonces el panorama de la multitud de jóvenes poetas de México? ¿Cuál el camino a seguir? Enclaustrarse, escribir con la ilusión de ser un día descubierto y recompensado, como la Cenicienta; o lanzarse al ruedo, al coliseo de popularidad, al Top Ten “¿Quiénes son tus diez poetas jóvenes mexicanos favoritos?”.

Descarto aquí la opción “madura y razonable” de escribir meramente por el placer, sin importar el reconocimiento. En una industria cultural y editorial como la nuestra, donde el nombre del escritor ha devenido en marca, y su persona en una especie extraña, entre rockstar y vocero de sociedad; donde si no eres marca registrada, avalada por, al menos, algún premio prestigioso, pocos, realmente pocos arriesgan capital por un libro tuyo, por la promesa del autor que un día puedes llegar a ser. Y quienes sí lo arriesgan (instituciones, centros culturales, universidades) no entienden en su mayoría el proceso editorial. Burócratas por editores, secretarias por correctores de estilo. Mal editan, mal corrigen, mal diseñan, mal eligen papel, mal empastan, mal imprimen, mal planean tiraje y, definitivamente, no promueven ni distribuyen: embodegan. Por ello la necesidad del Top Ten, porque las oportunidades, las buenas, son pocas. Nosotros demasiados: “¿Quiénes tus diez poetas mexicanos jóvenes favoritos?”.

Otra razón para la pregunta es la proliferación de premios, becas y estímulos a jóvenes creadores. De suerte que hay más de uno que lleva la misma cantidad de becas que de premios que de libros publicados. Otros que llevan subsistiendo cinco o seis años de becas estatales y nacionales ¿Es esto un pecado? ¿Es condenable ser retribuido por el trabajo? Si fueron ganados legalmente, creo que no. Lo que sí es evidente es que quienes escriben por el mero gusto, han quedado un poco en jaque, un poco en entredicho dentro de esta especie de olimpiadas juveniles.

¿Es esta una lucha voraz de premios y reconocimientos? ¿Es necesaria? No lo sé. Espero que no. Lo que tampoco sé es cuánto y cuántos jóvenes creadores pueden resistir, porque, aunque parte medular del oficio se llama resistencia, sin alguna retribución que valide o anime a seguir trabajando (y con retribución no me refiero a la farándula y el dinero, sino también el comentario, simple y llano, de alguien que te leyó, ver tu nombre impreso, la oportunidad de hacer llegar el mensaje) es difícil seguir produciendo. Más si se toma en cuenta que de algo debemos vivir, que empleos para poetas hay pocos, que los libros cuestan, que la renta…

Somos muchos y tenemos internet. Si bien es cierto que las generaciones antecesoras habían estado interesadas en conocer la obra de sus contemporáneos en otras latitudes, es a nuestra generación a la que le toca la posibilidad de acceder o “accesar” a obra de autores prácticamente inéditos, dentro del marco de la inmediatez, sin ningún filtro o previo reconocimiento de nadie más. La gestación de revistas culturales, independientes e institucionales de finales de los 80`s y principios de los 90`s, los encuentros de escritores, colectivos culturales, etc., nos han permitido contactar a toda clase de gente, proceso que, a otras generaciones, les llevó más de un par de años. Ahora nos es fácil mandar colaboraciones a revistas cuyos ejemplares jamás hemos tenido entre las manos, provenientes de Estados que nunca hemos visitado. En el Catálogo de Revistas de Arte y Cultura de 2006, publicado por CONACULTA, se registran 67 revistas en el área de literatura, 6 en teatro, 9 en cine, 108 en arte y cultura. Esto sólo en medios impresos. Cabe mencionar que no pocas de ellas tienen por cabeza y/o comité editorial a jóvenes creadores, de manera que se tiene, en distintas medidas, influencia directa en la decisión de lo que se va a publicar, lo que no se ha de difundir, las formas en que se ha de proceder. Otro paradigma es que, de haber grupos, ya no es forzoso que estén todos sus miembros localizados en una misma entidad geográfica. Esta es una nueva dinámica.

Con tantos autores lo lógico es trabajar juntos, hacer mancuerna, coludirnos, armar encuentros, mesas de lectura, eventos culturales, debates, foros de discusión, revistas, fanzines, editoriales; criticarnos, antologarnos, descalificarnos, aborrecernos, agredirnos, formar mafias y aplastar al contrincante. Recuérdese, yo dije lógico, no ético.

Otra característica es que siendo tantos, tan entusiastas y tan competitivos, seamos autogestivos. Somos los suficientes como para formar una micro sociedad de autores, editores, críticos y lectores. Lo que nos permite prescindir, si lo queremos, del patrocinio gubernamental, el padrinazgo, el reconocimiento previo de “las autoridades” de la cultura. Por supuesto, no todos lo están haciendo, hay muchos que babean (y seguirán babeando) por encontrar su nombre en, digamos, Letras Libres, pero en definitiva nadie se ha quedado sentado a esperar ese día.

De hecho, la generación de los 70`s y los 80`s ha mostrado interés en darse a conocer, incluso, por un medio poco prestigioso y nada crítico; inmediato y accesible al sólo dar click: internet. Caso especifico, Las Elecciones Afectivas, un blog con un fácil y acrílico sistema operativo: el primer autor sube su foto, algo a lo que pueda llamarle “poética”, su ficha biobibliogràfica, una muestra de su obra y una lista de autores, de quienes son sus amigos, compañeros estéticos, influencias; con quienes sale a tomarse la cerveza, con quienes quiere quedar bien, a los que reivindica, a los olvidados, a los de siempre, etc. de manera que, más que una antología, resulta un socio grama de la actual escena poética. En este blog la brecha generacional se ha marcado. Ya sea por indiferencia o apatía de las generaciones mayores, o por la impulsividad de los más jóvenes, la muestra es prioritariamente joven (30 nacidos en los 80`s, 46 en los 70`s, 21 en los 60`s o anteriores. Siendo Gerardo Deniz, de 1934, el mayor, y Eduardo de Gortari, de 1988, el más pollito). En dicha muestra, más que denotar tal o cuál estética o su valor, quiero resaltar que estamos muy lejanos a la homogeneidad estética que la hegemonía que Paz había trazado. Multitudinarios y caóticos.

La última cuestión es el centralismo y el caso de los Estados del norte. Por un lado, teniendo CONACULTA, con todo y Tierra Adentro, y las editoriales independientes (comerciales y emergentes) más grandes y consolidadas en el Distrito Federal y, por otro lado, un convenio concerniente únicamente a los Estados fronterizos que promueve a sus creadores mediante premios y encuentros regionales, apoyo monetario para la organización y/o traslado de un autor a otro Estado, se genera una dinámica que promueve (y presiona) el crecimiento (o desbordamiento) de autores fronterizos y defeños. Situación que deja un tanto incomunicado (y hoy en día incomunicado va siendo sinónimo de rezagado) a los Estados del centro y, sobre todo, al sur.

Ante estas circunstancias es más fácil optar por un Top Ten, una gráfica de popularidad inmediata y efímera, ajena al valor que sólo el tiempo y la crítica objetiva puede dar: el libro como un producto más. El autor como su vendedor.

Supongo que lo coherente sería ahora dar mi lista, mi Top Ten de jóvenes autores mexicanos (y nótese aquí que la pregunta siempre fue por los nacionales, como si no tuviéramos ya capacidad de vernos dentro de un complejo al menos latinoamericano o hispano parlante). Al respecto digo que no, que no son autores, que son obras, libros en específico, porque me resulta ridículo canonizar a un autor por su primer o su segundo libro tan tempranamente. Y que no creo prudente anexar mi lista de libros porque como toda mesa de novedades, al mes siguiente puede cambiar.

Para México, se trata de su futuro: cuántos (jóvenes poetas) mexicanos debemos ser.

miércoles, 2 de julio de 2008

Ya no sueñan los poetas cubanos, ya no sueñan."
Carta de Heberto Padilla a su jurado frustrado

Me arranco de cuajo
la capa romántica y todo el psicoanálisis y rujo
¡Arggg!
Me duele hasta el acero taimado
del aire que pregunta bajo el cielo
sin respuesta a lo que no se plantea,
surco la ciudad de México, trabajo,
voy a librerías y hundo mi mirada en los pezones
de una ciudad y una rubia esbelta que me mira
aletargada desde el fondo del bar,
quizá preguntándome: ¿qué sentido?
Regreso y lo encuentro entre estas cuatro paredes
que no tienen sentido pero rugen y segregan
mi propia conciencia atormentada:
ya no soy Rimbaud en una carretera de Puerto Vallarta en 1995,
pero sí quizá tal vez maestro que analiza los ensueños de Bachelard
a quien nunca ha comprendido la gloria que significa crear y ser poeta,
además de metiche donde geofísicamente nadie me ha llamado.
He dicho que me arrancaba el romanticismo y el psicoanálisis,
pero no puedo hacerlo, son estructuras de mi pensamiento,
y dictum más o dictum menos, nadie puede remar contra sí mismo,
a menos que se trate de un re menso, y entonces (en éste instante mirando al pobre ser humano ante la Historia: la ilusiones del gusano como dijo Hegel)
Y entonces…
¡Celia Cruz y la limusina naranja!
con tres millones de obreros y desempleados para mirar
y perder un poco de sentido donde quizá ya todo sentido esté perdido
menos el sustantivo abstracto, el mejor hermano,
la más temible prueba, la cara, la agresividad y un sonido de oboe que dice:
es el hombre, el hombre, con su pesada estulticia,
con su estúpido sufrimiento miserable y sus sueños diáfanos color bandera,
el hombre, el que recobra, el que mira cómo cae la mega tendencia y la pepita, la geopolítica y la carabina de ambrosio,
la ananké y la afros, Tales de Mileto, Sócrates, Napoleón y el lenguaje decodificado de todos los brutos misterios
que nos sorprenden día con día en el atajo hacia cualquier parte,
en el ir hacia la amada o hacia la metáfora,
hacia el destino o hacia un semáforo,
hacia el sexo como perfecto motivo de estallar en un binomio de imágenes paralelas o en la soledad de la inteligencia que debe redescubrir y sintetizar su propia experiencia.
¿Metadiscurso o micro chip? ¿Microsoft o Mac? ¿Salsa verde o roja?
¿Salir de vacaciones o quedarse a redactar la ultra novela?
¿Pero es que tú no ves televisión? ¿No has…?
Un color jade transparente palpitante,
madera de triángulo llamada esto es por ti:
Un azar ambarino pululante en un tacto y mirada de microbio llamado pesero,
una paleta, la alberca olímpica, mi propio pasado glorioso,
y todo ha pasado ya y todo está escrito,
y todo está bien y todo está mal, sin duda alguna,
pero es la ironía que hace chocar como rocas vivas a dos oleajes de pensamientos diferentes y brota la pregunta:
ruido, mucho ruido y basta, antes de enloquecer,
pero ya llegó la noche y uno se pone a escribir para atrapar los colmillos torcidos de dios entre palabras,
sin ser espejo, sin ser sudor, sino, para ser mejor,
por pura puta palabra, oscura, diminuta, brillante, acaso diamante,
sortija o camastro para el beso indicado,
que mi mitad es diferencia para lo mejor que tuvo éste poema y lo demás, como dijo Hamlet, es arreglar el mundo, y lástima,
uno nació para eso, no para el silencio.



18 de abril, 2004, ciudad de México.

domingo, 15 de junio de 2008

OCTUBRE 2004

Para Gabriela Botello

Esta noche evoco un suspiro,
que me lleve a la vorágine de un sueño tuyo,
ese temblor en los labios cuando se detiene
en mi saliva una sombra que no es la tuya,
sino de ti, sólo tu silueta,
la transparencia del amor que debe de doler
como si fuera pena ajena.
Es decir, detengo al arquero,
para llegar al continente de tu fundamento,
allá donde las huellas que cada flecha deja
son la constatación de lo que nos pertenece,
lo que en el tiempo y la tempestad hemos perdido,
para recobrarlo, para sacrificar el orgullo,
más no la paz incontenible de las sábanas
que más yo quisiera, para llevarte por un sendero,
que a pesar de ser de noche, ésta ciudad desconoce.
La vida y la ciudad, grave altisonancia,
la puerta conduce a la mirada donde todo es silencio,
un silencio repetido, silencio con una boca que sueña besarme
para conjurar la soledad de una memoria
que se levanta y echa a caminar, es deseo,
es la cautela, es la víspera de una mirada bajo
los techos de los antiguos tormentos,
pero es esa la mirada que los dislocará
y les exprimirá el siniestro,
el verdadero rumiar de lo cotidiano,
el siniestro… este portento que siempre aboga por lo nuestro,
no lo maldigas, déjalo llegar hasta tu pie,
para luego que se prenda de tu sueño y en soledad,
ya en reposo continuo, devuélvemelo como aquél suspiro.

lunes, 9 de junio de 2008

Caminando sin sentido entre lagunas cósmicas

Caminando sin sentido entre lagunas cósmicas

Donde voy, cuando camino

El cosmos me es tan impar

Reconociendo el mismo lugar,

Monótono marchar

A ninguna parte camine,

Mi caballo se aturde por el ruido

El mismo paisaje aburrido

El espacio es reconocido,
en ningún lugar nuevo volé

Solo destruyo los mismos senderos,

Y me ocupo de no detenernos

No caerme en el firmamento

Perseguir un mensaje oculto,

Mientras tu...

Me ocultas me escondes

Me tapas con una mentira
mientras yo grito

Estrellas marchitas
lo que tú ocultas,
quisiera no escondernos

En este espacio sempiterno
un miedo de creer todo,

La vida se recorre en una gota
y sin embargó no ser aun nada,

Caminando entre estrellas calcinantes

Ante los jueces más importantes

El miedo de un pegaso desplumado
tanto tiempo y seguimos en círculos

Las estrellas no recuerdan nuestros pasos
engañándome más y más…

domingo, 1 de junio de 2008

Cartas a los que se han separado.

Manuel Álvarez Bravo: soy más sinónimo, en el mail, del adelantado.

Anne Sexton: me llevo mejor conmigo mismo cuando estoy vivo.

Octavio Paz: Me debes una cerveza sol.

Jorge Luis Borges: El tigre no come margaritas.

Clarice Lispector: Claro que publicaré: es allí a donde voy.

miércoles, 28 de mayo de 2008

5

Tus pies iban al malecón,
en tus manos un cántaro,
en tu boca una canción.
Por mi ventana te miré,
como el sol por la tuya
al despertar.
Y así te fuiste:
sin prisa, sin retorno.
En tu cántaro se fue mi alma,
y en mi ventana tu rostro
se quedó a cantar
la canción de las olas;
y yo la escucho con eco entre tus brazos,
mientras vamos juntos rumbo al malecón.

6

Eres como las olas que al llegar
se despiden.
Apareces radiante y redentora,
rutilante.
Eres génesis de mar en reposo,
alegría,
pero también anuncio de tormenta,
agonía.
Tus manos son consuelo y condena,
doble réquiem,
epifanía.

7

Montado en un avión me cruzo el golfo
para verte al otro lado: hermosa,
sincera, marina. Y yo me asombro
de tus ojos de agua, de tu boca
de agua, tu cintura y tu omóplato,
tus piernas, tus manos, también tu espalda.
Me sorprendo pues parece que el golfo,
azul no acaba en ti sino comienza.
Y entonces me doy cuenta que te vi
salir de la otra playa, reventada
de otras olas, mojada de otra brisa.
Te dejé muy atrás en la otra costa
buscando tu quimera, tu reflejo.
Ora sólo me queda reinventarte
al revés: para que al decir adiós
a tu boca de agua,
en vez de despedida sea retorno.

lunes, 26 de mayo de 2008

Por la ventana

Sergio Loo

Niño volando un

niño disparado por la ventana por sus padres un

dìa soleado para salir a revolotear

Jabalina sonriente niño disparado va Mira apunta y

Niño volando quebrado un

en el suelo

Publicado en Oràculo. Revista de poesìa 21

jueves, 22 de mayo de 2008

1

Siempre soñé tus labios en los míos,
encontrándose trémulos y calurosos,
inciertos del sabor de la otra piel.
También soñé tus manos en las mías,
desnudándose ávidas y presurosas,
buscando el calor de nuestros cuerpos.
Después oí ese leve jadeo,
ése que imagino haces
en las pausas de tus besos.
Y desperté en la mar:
aferrado a la corriente de un madero
como a tu cintura,
yendo tras la muerte que me has dado.


*Este poema lo había publicado en Hápax poético con anterioridad, sin embargo lo publico de nuevo por motivo de secuencia.
Mérida 02/08

2

Volví tu noche oceánica un refugio
a prueba de ti.
Tu imagen la puse por todos lados,
como vacuna.
Y pronto de ti sólo quedó
el recuerdo de un naufragio.

3

Tus ojos de mar,
no por azules sino por profundos,
se fueron al horizonte.
Tu mirada,
entre rabiosa y nostálgica,
escupió un adiós que se perdió en las olas.
Y el mar,
en su eterna cinergia,
inmutable vio nacer la noche.

miércoles, 21 de mayo de 2008

4

Te quiero un montón aunque suene a letanía.
Te quiero de día y te quiero de noche,
en la selva, en el monte;
te quiero pelea, odio, rencilla,
y te quiero también algarabía.
Te quiero y no te hablo,
te quiero siempre mía.
Te quiero a dueto,
borracho,
maltrecho.
Te quiero querernos querer y quería.
Que si no quiero mar, será poesía;
y si no te quiero, ¿qué más querría?

lunes, 19 de mayo de 2008

Divagación amable sobre el ensayo

Si bien los poemas deben ser enviados para detener el holocausto de la guerra, a la manera en que la célebre fotografía de los años 60’s mostraba a una joven colocando una flor en el fusil de un soldado norteamericano, o bien, para ser declamados en voz baja entre dos enamorados, en el sentido en el que es la otredad, en lo otro del otro, donde debemos reconocernos hablando de los territorios amorosos y poéticos, en el ensayo, ya sea en su vertiente más filosófica o analítica o estrictamente literaria, siempre se debe cumplir una función específica: el ensayista debe fundamentar su opinión sobre determinada obra o también descubrirnos la trama de la realidad, es decir, mostrarnos su verdad sin caer en solipsismos y también —por qué no— lo que debería ser la verdad, lo que el género humano merece que sea su verdad recopilada, en tanto que somos contemporáneos del sida, de internet, de las tarjetas de crédito, del imperio de los medios de comunicación y los escándalos políticos.
El ensayo, o más precisamente, el ensayista, reconoce como auténticos camaradas a las obras, los personajes y los autores sobre los cuales versará su trabajo. Es cierto que en ésta época queremos saber qué significa la tonelada de información con la que somos bombardeados a diario, (este hecho explica la alta venta de libros de superación personal) pero también es cierto que por otro lado las cosas siguen siendo bien simples o en palabras del poeta chileno Pablo Neruda: “Sin duda todo está muy bien, sin duda todo está muy mal, sin duda”. Pero como que ésta opinión poética de los años setentas del sigloXX ya no nos parece suficiente. El escritor francés Michel de Montainge, el primer ensayista como tal, dedicó un ensayo a su dedo meñique al igual que a las más altas preocupaciones filosóficas y diversas formas de ser feliz, lo cual encierra la paradoja de que la labor literaria o más exactamente la escritura, aspira a convertirse en palabra de autoridad, ajá, sí y solo si pero empezando por uno mismo, es decir, la literatura es de una autoridad humana, cualquiera puede acceder a ella o incluso menospreciarla, pero ojo: ya sabemos lo que pasa cuando en las culturas las letras son menospreciadas, el holocausto nazi o los fundamentalismos religiosos y la falta de tolerancia son buen ejemplo de ello.
También es cierto que cada ensayo está escrito desde la punta del saber de su autor; no escribimos ensayos sobre lo que dominamos a la perfección (o por lo menos no ocurre así con los ensayos de éste tipo de conocimiento, el ensayo de divulgación científica es otra cosa) sino de lo que creemos tener un matiz de diferencia, desde donde se dibuje la diferencia de nuestra propia individualidad, por eso el ensayista crítico, siempre se nos presenta como incómodo, porque allí donde se muestra la inteligencia de modo singular no sabemos qué hacer con ella; luego vendrán los exegetas o los comentadores, ciertamente, pero cuando la obra artística irrumpe, se asienta en el mundo del arte y con lo que entra en interlocución es con las demás obras, no con los críticos. Precisamente por estas razones uno de nuestros mejores ensayistas mexicanos, Gabriel Zaid, dice y mantiene la postura de que un nuevo libro es siempre una nueva parte de la conversación en la sociedad. Y como el mismo Zaid lo diría, cito de memoria, “el mejor pensador es el que empieza pensando para sí mismo y no para los demás, por eso mismo, el pensador que quiere pensar por los demás nos resulta siempre demasiado serio, mientras que el primero es antisolemne”.

sábado, 17 de mayo de 2008

A la chica sin pantalones:*

sacrificando presto se volvió
que ya tenía que así lo harían
dejemos de hablar en estoy
hay oficiales de tejer seda
Después de conquistado México
después de quitadas las idolatrías
sabé e agora soy fiel y executor

*Poema dadaísta, extractado de La historia verdadera de la conquista de la Nueva España.

lunes, 12 de mayo de 2008

Romeo y Julieta

Romeo

Se resiste a tomarlo. La última ilusión mantiene en vida a la amada. De nuevo la razón le muestra su verdad en el alma. Su mano, a aquél frasco, de mortal impulso lo lleva a sus labios. Estertores, quejidos, espasmos. La boca musita apenas tenores quejas que las manos intentan ahogar en gritos ahítos de silencio.
Su cuerpo se contrae y sus ojos nublan el cielo raso, y entre estertores y espasmos, comienza una lágrima a rodar: al imaginar que la amada mueve un dedo y lo quiere tocar.
Piensa; una sonrisa.

¡MUERE!

Julieta

¡DESPIERTA! Con prisa, se

mueve...

Un dedo primero. El hermoso busto ya erguido, se tambalea por la droga que aún escande su marea. Con doble esmero logra enfocar su vista, un poco más para doblar su rodilla y el amor le posa en el suelo su pie breve.
Una fugaz saeta le cruza la idea, levanta un labio y relumbra la perla. Ve a la ventana: es de día. Una chispa triunfal aparece en sus ojos y su boca recita un nombre con magistral alegría. Camina hacia el sol y una pizca de terror ilumina sus versos.
Triste Venus que enardecida tomas el facón cual laurel, dudas y miras a tu amado yacer. Ahora ya está alfombrado de tinto el frío mármol.
Antes de cerrar sus ojos vio su vida fluir de su cuerpo y unirse en éter cuerpo, a la de Romeo.

---0---
*Pos ahí juzguen. Eso era lo que andaba escribiendo por ahí del 2001

jueves, 8 de mayo de 2008

Fortaleza

resbala en mi ventana
una sombra rajada de nostalgia

se diluye el recuerdo
cortando risas y fundiendo avernos

marchito mi jardín
convirtiéndolo en tundra de silencio

camina en mi mirada
fortaleza de sal amurallada

el tiempo me consumeel desierto va creciendo...

Utopía

manada de elefantes alados
sigue en estampida mis pasos

gaviotas azules revolotean
torbellinando mi cabeza

piso hormigas serpenteantes
que crujen en las paredes

luz selénica endulza el caos
diviniza la real utopía

cierro los ojos
los elefantes comienzan el vuelo

domingo, 27 de abril de 2008

Un lugar en medio de la luna

[fragmento]

I
Senderos de águilas y de serpientes,
montañas de agua, cristalina y diáfana,
ceñidas glaucamente por planicies
que se alzan ávidas al horizonte,
adonde el hálito de la mañana
guarece siempre su ser del calor.
Allí, columbra la zona lacustre:
colmado plexo de islas postizas,
hogar de reyes, quetzales y jade:
que riega el fértil suelo de maíz:
comida de oro de gente de bronce
que atisba el yelmo albo del volcán:
guardián eterno de mujer eterna
que besa cielos blancos, que más tarde,
florecen súbitos, pintando el valle
de rojos, gualdos, violetas y blancos
y verdes aves: quetzales y loros;
y azules aguas de ríos y de arroyos
que corren rápido a unirse al gran lago,
por donde vuelan cenzontles translúcidos
cantando el himno de Tenochtitlán.
Y ahí, parada en el Templo Mayor,
está la verde corona de plumas
y el ronco pecho del emperador,
que con oídos de vientos sutiles
escucha lenguas vinientes del mar,
de gente rubia con casas de palo
flotando cual hoja en agua de sal.
Antaño: Hombres de donde el sol nace,
sobre un madero a la deriva azul
-astilla rota en giros de ciclón-,
posaron pie seco en mojada arena:
moraron, uno en gracia y otro en pena,
en tierras mayas vecinas del sur.
Un hombre dellos defiende al vecino
Pues tiene hijos de mezcla imperial.
Madera errante bordea la península
y toca tierra en la zona Tampico
donde la sangre se sale a las barbas;
mas pronto fuego de pólvora roba
las vidas indias de héroes de guerra.
¡La Paz!
-Después de la muerte: forzosa-
Se otorgan 20 plañidos de madres:
todas bronceadas, con suaves contornos,
todas alegres, de herejes transfondos:
todas cambiadas por credos celosos.
Y fundan casas: la primer ciudad;
ciudad errante que escapa a las lluvias
-de nombre Villa Rica de la Vera Cruz-.
Y pies con polvo llegaron a ella
traído pronto del Valle Central.
Los pies traen oro con joyas y plumas,
también traen voces poéticas únicas.
No sabe oír las palabras el rubio:
presenta armas, prepara batalla.
La sabia y fuerte embajada se alista.
Sólo un suave seno turgente evita
las muertes: tiene por boca una flor,
en cada pétalo entiende un idioma
y en cada antípoda tiene una amor.

II
Presagios viejos, casi eternos, casi
-de varios cientos de tonalpohuallis[1]-;
solemnes cantan la vuelta del ave
-el ave víbora: serpiente alada-
que alguna noche abrasó, como el fénix,
su cuerpo entero: inmolación solar.
Los hombres, fútiles, apenas vivos
de inope fe, fe ciega, fe de pueblo
que grita júbilo, profecía hecha.
Engaño. España. Primera victoria.
España. Engaño. Contienen la flecha.
Engaño. España. La raza idolatra.
Guadaña en mano la muerte se alista.
Se signa un pacto de guerra y maltrato:
los totonacas se alían al barbado
y Moctezuma se entera en el acto.
Algunos hombres de barba española
se cansan del rubio, jefe hasta ahora,
y arman motín: ceguera del oro.
El jefe los mata a todos, y al rubio
que celos, desdeños y mal sembró
le tala los pies cual pena ejemplar...
—o—

[1] Periodos del calendario azteca de 260 días.

sábado, 12 de abril de 2008

En honor al Lagarto

Vocación de incertidumbre, la vida todavía llamea
más allá de los bosques,
donde nuestro encuentro puede ser fugaz y donde
cada quién vislumbrará su destino patinando bajo otras pestañas.
Clarividencia, sed del ámbar, pupilas de noche y animales que huyen
en rebaños.
Quizá de cada quién, lo más mío es éste
pequeño frasco que manipulo a ciegas
para adentrarme en los valles del poema.
Es la única salida, y la ilusión no viaja en tranvía,
sino en el sonido que delata la espesura del ser,
la penúltima frase de la conciencia
que se dicta a sí misma su propia autoridad,
su propia invención moral
y su determinación, quizá para no dejarse raptar
en este mundo donde todo es perdido y fulminado,
seremos secuestradores del verbo, espías de dios
y vendremos a arrullar a nuevas damas, únicamente,
Efraín, salvados por el ángel negro del poema, y sus alas.

Poema estilo los de Eduardo Casar

Tus hombros son dos espumas afiladas
a la orilla de una cabaña,
tu sonrisa es la paz vertical
de una corriente marítima que se alegra
al mirarse en otras pupilas,
tu voz es el fuego de una porcelana
que cae interminablemente en el eclipse
de un suspiro, donde contemplo
tu destino y sé de tu sonrisa de nuevo,
por un mástil que cae como la sombra de un olvido.
Es entonces cuando te retengo en mi memoria,
como esa escalera que subo mientras
tu bajas para encontrarnos en lo ajeno,
lo más propio, lo más precioso, la determinación;
como un oasis en medio
de la ciudad, para mirarnos, caminar y mirarnos,
desayunar y mirarnos,
vestirnos y mirarnos,
ir al cine y mirarnos, platicar de la película y mirarnos;
entonces, nos miraremos profundamente,
como si cada quien estuviera en diferente siglo,
en diferente calle, en diferente nombre, en diferente identidad,
hasta que de tanto mirarnos, tus cejas se parecerán a mis cejas,
tu boca a la mía, hasta que seamos entre tú y yo,
una sola sonrisa que no se despide.

domingo, 23 de marzo de 2008

Aforismos del caos

Tú que ni poema llegaste a merecer, te toca punto final.
*
Sobre el prójimo se ha escrito mucho verso,
Se ha maldecido, se ha injuriado, pero jamás se ha colocado
Los puntos sobre las íes en la palabra prójimo.
*
No le deseo mal a mi hermana, no le deseo mal a mi hermana, no le deseo mal a mi hermana..
*
Gravito en una soledad de cuarto piso sin molestar a nadie,
No quiero ser ni la música triste de la ex novia,
Solamente pretendo aportar un verso mínimo a lo ya recorrido,
A lo ya pensado, a lo ya vivido,
Es entonces cuando se presiente de nuevo la pandemia de generar caos
Por medio de la palabra, la totalidad de caer uno mismo en sus propias palabras: no condena, no salvación, simplemente el fenómeno siempre inabarcable, de que al momento de escribir, se caen de los dedos al texto una biblioteca, por pequeña que sea, y una obra, sea la obra propia lo que sea: escribir se parece a caminar por el mundo, uno siempre sabe ya donde es arriba y dónde es abajo, solamente que volver es acto de poetas, con razón Octavio Paz, hablaba de que la poesía no busca ni espera otra cosa que no sea la resurrección.
*
Escojo sin lugar a dudas aquél libro, éste, donde nada sé, donde todo está perdido. El libro imposible de referenciar con Algo.
*
El deseo?
Es inevitable, por supuesto, lo que sí puede evitarse es chocar contra él, ya que es tan hermoso.
*
¿Escribir dándole la espalda al mundo? Quizá sería más adecuado decir: se escribe después de hojear al mundo, hojearse a uno mismo, hojear a los otros para, por fin, hacer una hoja que valga la pena.

haaa la la la la juventud.

Rugido espeso, látigo de azúcar,
el titán del desprecio.
Mas por su amada no…
no se nombra, no se oculta, no renuncia.
Sino más bien se concatena.
En el abrevar azulado de la galaxia,
y aunque ésta no sea la triste canción de amor,
soy yo, trono de voz,
luciérnaga, verticalidad y zompantli
para los muertos que quieran saber
dónde está aquella calle, donde dos, una y uno, se amaron,
se depositaron y se reencontraron,
aunque bueno,
al final la faena terminó en la delegación.

jueves, 20 de marzo de 2008

Extrañamiento que no acaba**.

«...llorando, / llorando la hermosa vida.»
J. SABINES

Tiemblan mi sangre y mis piernas
de tu espíritu la ausencia,
pues no me basta más ciencia
que la tuya me concierna.
La distancia se acrecenta
en mi pecho detenido
que por más que haya venido
de tu ausencia se lamenta.
No te veo, A*..., ¿qué haces
que a mis brazos no retornas,
que a mi vida no la adornas?
Para, hermosa, ya no pases:
mi corazón a habitar
quédate con alegría,
que sin ti me pasaría
llorando la eternidad.


30/jul/2007



*(?)
**Algo que no sé que sea, lo único seguro es que lo rescaté del olvido.
Quizá sea un divertimento que me alivió en el momento, o quizá sea
algo que se me ha negado ver por ahora. Juzguen ustedes y sean
brutales.

martes, 4 de marzo de 2008

lunes, 3 de marzo de 2008

1

Siempre soñé tus labios en los míos,
encontrándose trémulos y calurosos,
inciertos del calor de la otra piel.

También soñé tus manos en las mías,
desnudándose ávidas y presurosas,
buscando el calor de nuestros cuerpos.

Después oí ese leve jadeo,
ése que imagino haces
en las pausas de tus besos.

Y desperté en la mar:
aferrado a la corriente de un madero
como a tu cintura,
yendo tras la muerte que me has dado.

Mérida 02/2008

Publico esto recién salido del horno, sin pulimentaciones, añadidos o correcciones.
Y esto no lo escribo a modo de apología, sino todo lo contrario.

martes, 26 de febrero de 2008

Fútiles.

Míranos si existimos, somos tu paisaje .

Pero tenemos una vida tan compleja

e insignificante como la tuya…


Fútiles.

¿Cuántas miradas yo te robe?

¿Cuántos cuerpos me rodean?

Donde dos almas chocan,

dos universos se tocan

viviendo un instante...

Tiempo de una mirada,

Tiempo de la indolencia.

*


Un programa de TV,

una página de Internet,

Pueden tener más valor,

Pueden ser más recordados,

Una vida es fútil;

Es notar y olvidar.

Mundo indiferente y brutal...

Mundo saturado y vano

*

¿Dónde van los rostros?

¿Dónde van los recuerdos?

¿Cuántas personas me miran?

¿Cuántas personas me conocen?

Soy un adorno en un paisaje,

Decorando otra vida.

*


Para luego borrarme...

Para luego borrarte.