© ®

Todos los textos son propiedad de sus autores, quienes tienen todos los derechos sobre ellos (¿o será al revés?) y han decidido libremente publicarlos aquí para la difusión pública sin fines de lucro. *Este proyecto está basado, en sus orígenes, en la idea de Dulce Chiang y Alicia Quiñones



jueves, 22 de mayo de 2008

3

Tus ojos de mar,
no por azules sino por profundos,
se fueron al horizonte.
Tu mirada,
entre rabiosa y nostálgica,
escupió un adiós que se perdió en las olas.
Y el mar,
en su eterna cinergia,
inmutable vio nacer la noche.

No hay comentarios: